Encontrando Camino
Me muero de ganas,
Me muro de ansias,
Pero no queda nada más
Que batir contra las mismas
Luchar por encontrar
El camino que me traiga de vuelta
La calma y la paz,
La tranquilidad y la satisfacción,
De vivir el momento
De soledad y de espera
Pelear por encontrarme a mí misma,
Sonriente como siempre,
Con ánimo, mesura y sabiduría,
Sin falta de la mano de Dios,
Para guiarme por donde tenga que viajar
1 Comments:
Hola, tía tutora (del año pasado)!
Bueno, supongo que tienes razón y que hay momentos en la vida en qeu no sabes qué diantres te ocurre, que te sientes como en una botella a la que le están poniendo el corcho, o como si estuvieras en esas ruedas de ejercicios de los hamsters.
Como bien dices, no queda otra que ponerle el hombro, dejarlo todo en la cancha, como dirían los jugadores de fútbol. Dios siempre estará ahí esperando por ti, y tanto él como nosotros sabemos que somos capaces de volver a encontrarnos y reencantarnos, de escribir de nuevo las páginas de nuestra vida y de ser de nuevo y para siempre hijos del viento.
Que esté lindo, tía. Escribe medio depre, pero me gusta su blog. Besos
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